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Visión de un «retornado»: Chile no existe sino en las series de telenovela
— Apuntes sobre «Telenovela errante» (Chile, Raúl Ruiz, Valeria Sarmiento) y sobre la discusión con la prensa del 12.08.2017 en Locarno.
Valeria Sarmiento en Locarno
«Telenovela errante» se estrenó el 11.08., en el Festival Internacional de Locarno, festival de importancia mundial en el que el director Raúl Ruiz ya era conocido por haber ganado el «Leopardo de Oro» con su película «Tres tristes tigres» en 1969. Ambas películas tienen como cuadro de acción la telenovela, tan popular, como género, en Chile y en Latinoamérica, en general.
¿Cómo encuentras tu Chile natal al volver después del exilio?
Como respondiendo a esta pregunta, el director chileno Raúl Ruiz, esbozó y empezó su película «Telenovela errante». En 1990 volvió a Chile después de una larga ausencia impuesta por el exilio en época de la dictadura militar. ¿Cómo encontró su país? Para decirlo, a Ruiz se le ocurrió echar mano de las telenovelas, de las series televisivas que en esos años acaparaban la atención de mucha gente en Chile y en los países latinoamericanos, para darnos a conocer su visión respecto a la sociedad de su país en los 90’: el incipiente retorno a la democracia.
¡Ruiz le dio en el clavo!
Lo singular de la cinta no está sólo en recurrir a la telenovela como cuadro, tampoco es solamente la visión de un exiliado por la dictadura de Pinochet que retorna a su tierra, si no que se trata de una película extraviada durante 27 años y por ende, inédita. El proyecto de Ruiz no se completó por falta de dinero, el director lo dejó pensando quizá retomar el proyecto en el algún momento, qué intelectual no deja durmiendo proyectos en las gavetas del olvido, o de los archivos de planes postergados. Pero este proyecto nunca fue retomado por su director. Otro rasgo original es que Ruiz se sirve desde el título de una telenovela turca para tejer su narración. En 2014 la serie televisiva chilena acapara la audición y por esta razón, la crítica ha querido ver en el filme de Ruiz un trabajo de anticipación, futurista, o si se quiere de olfato privilegiado …
Montaje y acabado por Valeria Sarmiento
El trabajo de completar la película y articular los fragmentos correspondió a su viuda Valeria Sarmiento con la colaboración de la actriz «fetiche» de Ruiz y productora Chamila Rodríguez y del también productor Galut Alarcón (ambos de la productora Poetastros) y como nos refiere Valeria Sarmiento, la inapreciable colaboración financiera del Consejo Nacional de la Cultura. En la conferencia de prensa en Locarno, Chamila le dijo a Valeria: tu siempre montabas las películas de Raúl. Y Valeria precisó: si, he montado unas 50 de unas 100. «La dividí en partes (se refiere a los 7 capítulos correspondientes a los 7 días d ella semana) y le dí una imagen más lúdica, pensando que eso le habría gustado a Raúl». Valeria dice que fue todo un proceso el rearmar la película como si fuera un rompecabezas.
Visión de una democracia recuperada pero incipiente
«Telenovela errante» está filmada en el primer año de la democracia recuperada después de la traumática dictadura militar. Una democracia aún frágil y con instituciones heridas por las secuelas de una cruenta dictadura. Por medio de piezas de televisión muestra una realidad chilena que no existe más que en capítulos seriales. Humor, pero negro. Se atisba el folklore de las disquisiciones ideológicas de la izquierda, el machismo, las expresiones a cuál más vulgares y una colección de chilenismos.
¿Cómo ven el filme los actores después tanto tiempo?
Chamila: yo saludo la visión sarcástica más que ideológica de Raúl al tratar las telenovelas turcas. Algunas las llevé al teatro. Ahora, sobre todo los monólogos, los veo muy poéticos. Valeria acota: Raúl a través de los «diálogos quebrados» decía mucho. El rol de la telenovela fue el de «mostrar a los chilenos, cómo hablan los chilenos» (posiblemente sin pensar en los problemas que se creaba para los traductores a otras lenguas).
Francisco Reyes: Relación con la juventud
El actor Francisco Reyes pone de relieve la relación con la juventud en esta obra cinematográfica y las motivaciones de Raúl Ruiz. Rescata como elemento válido «el sarcasmo lúcido, donde la palabra se transforma en imagen, en acidez».
La recepción del filme en Chile
Valeria manifestaba su confianza en que las nuevas generaciones apreciarán el trabajo de releer la historia, de revivirla. Esta es una película no destinada a un cine masivo que llene salas. En Chile aún no se vio la película, se la estrenará próximamente en el Festival de Valdivia (9 al 15.10.2017) nada menos que como filme de apertura. (http://www.ficvaldivia.cl)
La herencia de la dictadura
Alguien recordó la afirmación del director chileno: «Chile está maldito» («Si te has portado mal en esta vida, en la próxima te conviertes en chileno»). Con dolor, —nos dice la actriz fetiche de Ruiz, Chamila Rodríguez, hija de exiliados de la dictadura— el director se refería a un Chile en el cual el dictador estaba aún detrás del poder, lamentablemente «hoy está todavía vigente la Constitución de Pinochet».
El «Leopardo de Oro» 1969 ¿sirvió?
Alguien pregunta a Valeria si la distinción locarniana en 1969 tuvo alguna utilidad para Raúl. Respondió que sirvió mucho para abrirse, para hacerse conocer más, e incluso, añadió sonriendo, mis padres aceptaron mi matrimonio con él.
Una visión de los «retornados»
Los que no salieron de Chile, llamaban casi despectivamente a los que salieron y volvieron, «los retornados». No olvidemos que cuando se vuelve a vivir la incipiente democracia, los que se quedaron se atribuyen la lucha por la salida de la dictadura. Ruiz y Valeria eran pues retornados, vocablo que según esta última es un nuevo «chilenismo». Una visión irónica de un retornado, cómo ve éste una democracia incipiente y débil: un Chile de telenovelas,
