| CINE | NOTAS | REP. DOMINICANA |

El Suplente: una película con alma

Nota sobre «El Suplente» de Diego Lerman (Argentina) por María José Burguillos del Valle de ©PuntoLatino, Glarus 09.12.2022, en el marco del Festival de cine latinoamericano «Pantalla Latina», San Gallen (Suiza).

cine suplente700 

La educación es sin duda uno de los pilares de la convivencia social. Junto a la familia, la escuela cumple la función de educarnos en valores y prepararnos para la vida en sociedad. El cine no es ajeno a ningún aspecto social, y esto es válido para el cine en general, no solo para las obras encuadradas en el denominado cine social. Es este seguramente el motivo por el que al séptimo arte no le ha pasado desapercibido el potencial narrativo y cinematográfico de las historias que tienen como tema central la escuela y la relación entre profesores y alumnos, especialmente cuando los conflictos generacionales y los problemas derivados de la aceptación de la autoridad en las aulas sirven como premisa dramática. La figura del profesor que se enfrenta a un grupo de adolescentes rebeldes y conflictivos cuyo respeto se tiene que ganar a base de empatía y de autoridad, es uno de los arquetipos que encontramos en películas que forman parte de nuestro imaginario colectivo, entre cuyos títulos encontramos Rebelión en las aulas, película británica protagonizada por Sidney Poitier, y El club de los poetas muertos, protagonizada por el carismático y tristemente fallecido Robin Williams y ganadora del Oscar al mejor guion en 1990.

El suplente es una película que podríamos enmarcar en el grupo de las mencionadas más arriba. Narra la historia de Lucio (Juan Minujín), el protagonista, un profesor de literatura que tiene que hacerse cargo de una clase de estudiantes de una escuela en un suburbio de las afueras de Buenos Aires. En su primer día de clase se da cuenta de que su tarea no resultará sencilla, pues tendrá que impartir la asignatura de literatura a un grupo de alumnos de secundaria pertenecientes a familias sin recursos económicos y cuyo interés por la enseñanza en general, y la literatura en particular, es prácticamente nulo. A pesar de ello, el profesor consigue conectar con las preocupaciones derivadas de los problemas cotidianos de esos jóvenes en riesgo de exclusión social y poco a poco se va ganando la confianza y el respeto de sus alumnos, que no ven en él al típico profesor preocupado por imponer su autoridad, sino a alguien empeñado en ejercer de pedagogo y establecer un vínculo empático con sus estudiantes. El personaje de Lucio retrata a un profesor comprometido y sensible a los problemas sociales de sus alumnos, en los que intenta despertar el interés por la literatura fomentando en ellos la capacidad de expresarse, como una metáfora de la toma de la palabra que les permita poder alzar su voz en un entorno socioeconómico que les ha asignado la posición de víctimas de un sistema que les condena al fracaso escolar y la marginación.

Diego Lerman, guionista y director de la película, ha sabido ambientar su relato en un entorno sórdido y distópico, en el que reinan la desigualdad y la desesperanza. Pero es en medio de esa desesperanza que brota la semilla de la posibilidad de un futuro mejor y de la justicia social, a condición de que la literatura y la poesía logre despertar la esperanza. ¿Para qué sirve la literatura?, pregunta Lucio a sus alumnos el primer día de clase. Para nada, contestan. Y el alma, ¿para qué sirve el alma? Esa es la pregunta clave que hace que un profesor de literatura consiga despertar el corazón de unos jóvenes que se enfrentan al destino de fracasar o de cambiar el mundo para mejor.

Ficha técnica:

El Suplente, Argentina, 2022, drama, 101 minutos

Director: Diego Lerman

Guionista: Diego Lerman, María Meira, Luciano de Mello

Reparto: Juan Minujín, Bárbara Lennie, Alfredo Castro, María Merlino, Lucas Arrua, Rita Cortese.

Compartir en redes:

Menú