cine invierno521x294


| ZFF 2016 | ZURICH |
 

El Invierno: un drama social comprometido con vistas patagónicas espectaculares

— A propósito del filme de Emiliano Torres (Argentina 2016), nota de Rocío Robinson, Dr. Phil.

La historia de la película “El Invierno” del argentino Emiliano Torres es a primera vista bastante simple: un viejo capataz de una estancia en Patagonia es despedido de su trabajo y un hombre más joven toma su lugar. El cambio no es fácil para ninguno de los dos y cada uno deberá sobrevivir al siguiente invierno. Lo que comienza con espectaculares paisajes de la región, termina con una magnifica lucha de sobrevivencia personal sobre la ambición y la soledad extrema. El director Emiliano Torres ya ha hecho tres películas de corto metraje y ésta es su ópera prima. Detrás de la aparente sencillez de este filme, Emiliano Torres logra una historia mínima e intensa sobre el valor desechable de los trabajadores estacionales en nuestro mundo actual.

 

Emiliano Torres estuvo presente en el Zürich Film Festival y Rocío Robinson de PuntoLatino pudo conversar unos minutos con él después de la proyección

— ¿Cómo llegó a tal idea para hacer la película?

— Todo comenzó con un viaje en la Patagonia cuando me encontré en medio de una tormenta. Finalmente, después de muchas horas, encontré refugio en el primer lugar posible, era un rancho con un capataz muy similar al de la película. Me quedé allí esperando a que terminara la tormenta. Los patagónicos no hablan mucho sobre sus emociones. Y yo tampoco. ¡Por eso hago cine! Me fui de allí sin saber nada sobre él, con una sensación muy fuerte del aislamiento y decidí escribir la parte de la historia que faltaba. Entrecrucé la historia con cosas personales y el trabajo de los trabajadores estacionales del norte al sur.

 

— ¿Quiso hacer alguna critica social?

— En esta película, no hay muchos actores, usé más que todo trabajadores rurales. Quería hacer una película muy simple. Mi mirada debía ser como la de ellos. Traté de no escribir mucho dialogo y el desafío de hacer una película con muy pocos elementos es muy estimulante. La película trata sobre todo un territorio prácticamente en venta. Es una triste realidad. Es difícil encontrar los dueños auténticos de esas tierras. Los indígenas fueron masacrados ya hace muchas generaciones atrás. La gente que está ahora allí son hijos de colones ingleses y escoceses, pero son muy, muy pobres. Es un lugar fascinante, contradictorio. Detrás de cada carta de postal hay una historia de sangre y muerte debajo de la tierra. Pero más que todo quería mostrar que los trabajadores estacionales no están representados por ningún sindicato y son muy vulnerables al abuso y no tienen a nadie que les ayude a defender sus derechos. Y por lo tanto, muchas veces, los problemas se terminan resolviendo a tiros.

 

— Tuve la impresión que hay mucho simbolismo en la película…

— Sí, aparte de la historia de los trabajadores que van hasta el fin del mundo para encontrar trabajo y que sacrifican todo para mantener ese trabajo, la película también trata temas sobre las diferentes generaciones. Nos recuerda a la expresión universal que para que algo comience, algo tiene que terminar o morir. Hay varias interpretaciones, pero una de ellas es definitivamente los ciclos de la vida. Al final de la película hay una pelea casi primitiva entre el viejo y el joven. Una lucha para la sobrevivencia. La película también trata sobre la relación entre el hombre y la naturaleza. Esa relación es evidente. El paisaje es un enorme desierto inhóspito, abstracto.

 

— ¡En todo caso, el paisaje es muy bello!

Filmamos en la provincia de Santa Cruz que queda a 3.5 horas de vuelo de Buenos Aires y después 3 horas adicionales en auto. Nunca se había filmado antes allí. No hay señal de Internet, no hay agua, no hay luz. Esta cerca del Chaltén, la base para escalar dos montañas cerca. El Calafate y Río Gallegos están un poco cerca de por allí también. Pudimos aprovechar al máximo los recursos estéticos que el paisaje espectacular de la Patagonia nos ofrecía: las montañas, los valles, las lagos, las vistas panorámicas. Tuve que cambiar el guión muy seguido a causa del clima. ¡Por eso tengo que confesar que el viento también dirigió la película! Solo trabajamos con luz natural y con postura documental.

 

torres emiliano rocio521

El director argentino Emiliano Torres como Rocío Robinson de PuntoLatino

 


 

En PuntoLatino más sobre el Zurich Film Festival

 


 

 

Compartir en redes:

Menú