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Música indígena ecuatoriana en Winterthur evoca la naturaleza
Dos maestros: Emmanuel Siffert (SUIZA) y Wilson O. Haro (ECUADOR)
— Sobre el concierto de la Orquessta del Musikkollegium de Winterthur. Nota de Cristina Trigueros, colaboradora de © PuntoLatino —
La Orquesta del Musikkollegium de Winterthur está presentado una serie de conciertos dedicados a la familia, dentro de su programa 2013/14. Entre ellos se consagró el tema al Ecuador el concierto del pasado día 8 de junio 2013, llamado: «Ecuador-musikalische Fiesta Latina». El lugar, la Casa Consistorial de esta localidad.
El director de este concierto fue el suizo Emmanuel Siffert, quien invitó a Wilson Orlando Haro a acompañar las piezas musicales con su rucu-pingullo. No en vano Emmanuel Siffert estuvo a cargo de la dirección de la Orquesta Sinfónica de Ecuador hasta el año 2010, donde colaboró con Wilson Orlando Haro. Este ecuatoriano, originario de Cotacachi, es, desde hace once años, el director de la Banda Municipal del Distrito Metropolitano de Quito, con una completa carrera musical y pedagógica a sus espaldas. De la amistad de estos dos grandes músicos surgió la idea de traer hasta Winterthur la sonoridad ecuatoriana indígena y hacer a los adultos y, sobre todo, a los más pequeños partícipes de su belleza. Wilson O. Haro tocó el ruco-pingullo, palabra quechua con que se denomina el antiguo instrumento musical indígena en forma de flauta pequeña de madera.
Los asistentes al concierto pudimos descubrir interesantes aspectos de la música ecuatoriana, entre ellos, la utilidad que se le da a este instrumento indígena, con el que se comunican los ecuatorianos en las montañas en derredor del volcán Pichincha. También escuchamos una pieza compuesta por Wilson O. Haro: «Galápagos», de gran hermosura y armonía musical. El concierto se completó con otros fragmentos de Segundo Luis Moreno, Geraldo Guevara, Carlos Bonilla Chávez y Jorge Oviedo; músicos y compositores ecuatorianos con el mismo interés: la música ecuatoriana indígena.
La actriz Anette Herbst estableció un ameno vínculo entre la música y el público de corta edad, que seguía a la actriz, a lo largo del patio de butacas, imitando la fauna ecuatoriana y conociendo las historias de este lindo país de América.
Tras el concierto, Wilson O. Haro contestó con agrado a las preguntas de Punto Latino. Me contaba Wilson el interés que tiene por expandir la cultura indígena a los niños: «informar y educar a los más pequeños en la riqueza y variedad cultural es esencial». Me fascinó la felicidad con la que se refiere a la música indígena y a la naturaleza ecuatoriana, en concreto al Parque Nacional Yasuní, ubicado en las provincias de Orellana y Pastaza dentro de la Región amazónica ecuatoriana. Esta región es única por gozar de la mayor diversidad biológica del mundo y esta riqueza se protege en Ecuador, sabiendo la importancia vital que encierra. La protección de la naturaleza está en relación directa con la soberanía alimentaria y la protección de la autenticidad sinfónica indígena. Así se preservan las riquezas del país. Wilson O. Haro es un embajador de esta fusión entre naturaleza-vida-música ecuatoriana.
Es la primera vez que Wilson O. Haro visita Winterthur y el jardín cercano a la Casa Consistorial le transporta a su querido país, por esa ebullición de vida floral bajo el sol de verano. El compositor ecuatoriano, antes de despedirse, manda un cariñoso abrazo a los lectores de Punto Latino.
Wilson Orlando Haro y Cristina Trigueros de PuntoLatino
Gracias por acercarnos Ecuador a Winterthur, Wilson, aquí te esperamos con los oídos bien abiertos para sentir el indígena rucu-pingullo.
Reportaje y fotos: Cristina Trigueros para © Punto Latino. Winterthur 9 de junio 2013.