2015: Paléo 40 años ..., Julie Bauer

domingo, 26 julio 2015

| NOTAS MUSICA | NYON |

Paléo 2015 : 40 años de música, de estrellas y de recuerdos

— Por Julie Bauer de ©PuntoLatino —

Para sus 40 años, el Paléo Festival de Nyon alargó las festividades de un día, añadiendo el lunes a la manifestación, y preparó una programación mezclando artistas que han formado parte de la historia del festival, y otros inéditos. Después de tres noches con Robbie Williams, Sting o Kings of Leon, el jueves estaba dedicado, entre otros, a dos de acostumbrados del Paléo, Ben Harper y Johnny Hallyday.

Gary Clark Jr. conquista al público

Después de semanas de canícula y una noche lluviosa, ésta tarde del jueves se anunciaba perfecta. Si, antes de la puesta del sol, los brumizadores seguían siendo las estrellas del recinto, la noche trajo un poco de frescura bienvenida, lo que se necesitaba para poder bailar hasta las tres de la madrugada. Así, los espectadores acudiendo al primer concierto en «La Grande Scène», no se arrepintieron de pasar un poco de calor, tanto Gary Clark Jr., les deslumbró con su gran talento. El americano acabó conquistando al público en menos de dos canciones gracias a su blues tirando al rock muy ameno y su dominio de la guitarra. Una buena manera de abrir esta noche dedicada, principalmente, a este instrumento.

Viaje al Extremo Oriente

Antes de acudir al concierto de Ben Harper & The Innocent Criminals, quedaba tiempo para poder hacer una inmersión en el «Village du Monde» dónde el invitado de éste año era el Extremo Oriente. Entre decoraciones, linternas y comida de esta región abarcando China, Japón, Tuvá, Taiwán, Corea del Sur, Mongolia y Tailandia, el Domo abrigaba a grupos musicales. Así, The Paradise Bangkok Molam International Band, vino a presentar su música tradicional tailandesa tintada de sonidos modernos. Una ocasión, para los espectadores, de descubrir instrumentos tales como el khene (órgano de boca), o el laúd tailandés y de dejarse llevar hacia otra parte del mundo.

Ida y vuelta de Jamaica a EE.UU.

Mientras tanto, el jamaicano Anthony B, ya había empezado en el escenario «Les Arches», frente a un público muy entregado, a cantar su reggae lleno de reivindicaciones. Un concierto enérgico que maravilló a sus seguidores. A penas el último acorde tocado que ya era tiempo de volver a «La Grande Scène» para ver a Ben Harper, 21 años después de su primera participación a Paléo, dar un recital de alto rango. Disfrutando de los últimos rayos del sol y de los impecables riffs de guitarra del artista, el público se puso a bailar y a rememorarse los viejos tiempos con algunos de los grandes éxitos del americano. Al acabar el concierto, los más jóvenes se empeñaron a devolver al escenario a «Les Arches» donde Biga*Ranx, el precoz artista francés, tocaba su reggae a veces mezclado con un toque de hip hop. Un coctel ameno que triunfó entre la audiencia.

Johnny Hallyday decididamente vivo

Al acercarse la media noche, ya era tiempo de preparase y de encontrar un buen sitio para el concierto de Johnny Hallyday. El indestructible rockero, presente por la segunda vez en Paléo, estaba muy esperado por sus numerosos fans, pero también por todo el recinto. ¿A quién no le puede interesar ver a una leyenda en un escenario? De repente empezó el espectáculo, con el baterista bajando del cielo, y un Johnny que se presentó con gafas de sol y entonando «Rester vivant», quedar vivo, un lema que a los 72 años el artista aplica como nadie. Encadenando con canciones de su nuevo álbum, el cantante acabó encendiendo la mecha entonando sus grandes éxitos. Desde «Gabrielle» hasta «Tenessee», pasando por «Le Pénitencier», «Que je t’aime», o, evidentemente «Allumer le feu» con fuegos incluidos, el público cantó, bailó, gritó y, sobre todo, disfrutó. Los numerosos músicos virtuosos que acompañaban al «ídolo de los jóvenes» tuvieron también cada uno un momento para demostrar su talento. Pero una hora y media es demasiado poco para repasar el repertorio de una leyenda. Al llegar al final del concierto, el rockero volvió al escenario una última vez para cantar la balada «Seul» y, el siempre esperado «Toute la musique que j’aime», una buena manera de concluir esta noche en Paléo, el más grande festival de Suiza que consigue abarcar todos los géneros y las generaciones, presentando toda la música que le gusta a los 270’000 visitantes de esta edición

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