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La llama del tango enciende Ginebra
— por Julie Bauer, @redactora de PuntoLatino
La espectacular compañía argentina de tango, “Tango Fire Company”, del coreógrafo-estrella internacional Germán Cornejo entusiasmó una vez más al público ginebrino con su talento, su originalidad y su extraordinaria proeza técnica. Su nueva producción, “Tango Fire – Flames of desire” enciende el escenario con una función más sensual que nunca.
Estrellas internacionales
Después de haber conseguido bailar sobre cada uno de los más famosos escenarios del mundo, la compañía de Buenos Aires fundada en 2005, volvía a Ginebra con su nueva producción. Su receta, que consiste en juntar alrededor del coreógrafo-bailador Germán Cornejo y su pareja Gisela Galeassi, cuatro parejas de nivel internacional (Sebastián Alvarez y Victoria Saudelli, Marcos Esteban Roberts y Louise Junqueira Malucelli, Ezequiel Lopez y Camila Alegre, Mariano Balois y Florencia Roldan), un cantante (Jesús Hidalgo) y una banda (Clemente Carrascal [bandoneón], Gemma Scalia [violín], Matias Feigin [teclado], Facundo Benavidez [contrabajo]), sigue siendo exitosa.
Este hecho se comprueba al empezar las primeras notas, cuando el espectador se deja enseguida abarcar en algún bar de Buenos Aires, con la aparición de la pareja estrella moviéndose suavemente, abriendo la noche con un toque decididamente sensual. Este preludio deja rápidamente lugar a un torbellino incluyendo a cuatro parejas más demostrando una velocidad increíble. En el medio, un teclista, una violinista, un contrabajista, y un bandoneonista marcan el ritmo, tocando las más famosas melodías de tango de maestros como Carlos Gardel o Astor Piazzolla.
Oblivion
Libertad y originalidad
A medida que el espectáculo se desencadena, se destaca claramente la originalidad de esta compañía que reside en la gran libertad artística dada a los bailarines. Cada una de las parejas demuestra su propio estilo, lo que le permite expresar totalmente su arte y su personalidad, así como dar rienda suelta a su talento. Una manera de poner de relieve las diferencias de temperamentos de las cinco parejas: cariñosos, pícaros, graciosos o apasionados, todos se expresan a través de gestos, de mímicas, o de momentos de comedia silenciosa. Al caer por primera vez el telón, la sala está ya conquistada y, durante el descanso, el tema de conversación favorito tiene que ver con donde apuntarse a clases de tango.
Proeza técnica
En la segunda parte del espectáculo, la comedia y la actuación dejan sitio a la proeza técnica y atlética. El fuego está más presente que nunca, con trajes cada vez más sensuales y deslumbrantes. Cada pareja presenta al público una muestra de lo que sabe hacer durante un solo asombroso. A veces, una se sorprende mirando los pies de los bailarines para comprobar si llevan patines, tanto su manera de deslizar y las elevaciones se aparentan a las que se pueden admirar en el patinaje artístico. Las cabezas de las bailarinas se acercan a unos centímetros del suelo, sus cuerpos dan vueltas por los aires, todo con una precisión milimetrada, mientras que la sala aguanta su respiración, antes de aclamar a los artistas.
Al final, el público conquistado, se levanta para aclamar durante varios minutos la compañía que, seguramente, volverá pronto para presentar una nueva propuesta todavía más espectacular.
Germán Cornejo, Gisela Galeassi
Marcos Robert, Louise Junqueira Malucelli
Julie Bauer, Ginebra 13.03.2017