| NOTAS SOBRE ÓPERA |
El Barroco más moderno en la Opernhaus de Zúrich
Glarus, 7 de octubre de 2021. Sobre L’incoronazione di Poppea, María José Burguillos del Valle de ©PuntoLatino, escribe una nota. Asimismo, María José hizo una entrevista a dos tenores que actúan en esta ópera (ver enlace abajo de esta página). También el enlace a la presentación de esta ópera se encuentra abajo de esta misma página.
El 17 de septiembre 2021 se representó L’incoronazione di Poppea de Claudio Monteverdi (1567-1643), en la Opernhaus de Zúrich, bajo la batuta del director italiano Ottavio Dantone.
Estrenada en el Teatro Grimaldi de Venecia en el año 1642, esta ópera es un drama musical en tres actos con libreto de Francesco Busenello y creó el paso del Renacimiento al Barroco. Es una de las primeras óperas en representar personajes históricos, basados en los anales de Tácito, y en presentar las deidades Fortuna, Virtud y Amor. Su trama la entretejen el poder, lo erótico, el crimen y la poesía a partes iguales, como si se tratara de un drama de Shakespeare.
L’incoronazione di Poppea nos traslada a la Roma Imperial alrededor del año 60 de nuestra era y relata las intrigas de Sabina Popea para esposar a Nerón y ocupar el trono junto a él, aunque eso suponga el destierro de la emperatriz Octavia junto a su amante Otón, así como la muerte de Séneca. Esta ópera representa el triunfo de la ambición y del poder frente a la virtud.
En el elenco de artistas destacan el contratenor David Hansen en el papel de Nerón, la soprano Julie Fuchs como Popea, y los tenores hispanoamericanos Emiliano González Toro y Manuel Nuñez Camelino. Estos dos últimos concedieron una entrevista a PuntoLatino, publicada en estas páginas, y es toda una clase magistral sobre Monteverdi y sus óperas. Los cantantes deleitaron a su público tanto con sus portentosas voces como por sus magistrales interpretaciones, expresando con gran virtuosismo la naturaleza de los personajes representados. Mención especial merece la puesta en escena del director español Calixto Bieito, una puesta en escena llena de expresividad y de un realismo muy actual, que refleja a la perfección las cualidades humanas de sus personajes. Calixto Bieito ha pretendido con esta escenografía una metáfora de nuestro mundo de hoy, un mundo dominado por el exhibicionismo, la falta de escrúpulos y el narcisismo que destilan las redes sociales.
La escenografía consta de una pasarela oval que rodea a la orquesta. Sobre esta pasarela van desfilando los personajes, a cuyos lados aparecen diversas pantallas, donde se muestran imágines de diferentes escenas de la ópera. Otra particularidad de la escenografía es la presencia de público en el escenario.
El broche a esta bella ópera lo puso el sublime aria final “Pur ti miro, pur ti godo” (ya te miro, ya te gozo), el primer dueto de amor de la historia de la ópera, interpretado por David Hansen y Julie Fuchs. El público pudo disfrutar de un espectáculo de gran calidad, una de esas óperas que permanecen en la memoria de todo buen melómano. Una vez más la Opernhaus de Zúrich consigue hacer feliz a su público, después de tantos meses de restricciones y cancelaciones de espectáculos por la pandemia.
